Riesgo idiosincrático
Conocido como riesgo propio o diversificable, es aquel que viene con el activo como tal, afectando a este por separado. Es el riesgo que tiene una inversión en particular y es la parte del riesgo que puede ser eliminada mediante diversificación.
Afecta exclusivamente a la empresa, sector, país, en el que se encuentre el activo. Dadas estas características hace que una buena estrategia de diversificación en los portafolios se pueda eliminar casi en su totalidad este riesgo, dado que los otros activos que no han sido afectados pueden compensar las pérdidas.