Presupuesto

Podríamos definirlo como el ejercicio de calcular y proyectar ingresos y gastos en que se incurrirá durante un período específico de tiempo (corto, mediano o largo plazo).  

El presupuesto, también, es transversal, en la medida que es una herramienta aplicable tanto para administrar los recursos propios, los de una familia, de un grupo de personas, de una empresa, de un proyecto, de un gobierno o cualquier otra instancia en que se generen y gasten recursos.  

Si lo aplicas a tus finanzas personales, en el presupuesto tendrías:  gastos fijos como 🚌 transporte, 🏠 dividendo o el arriendo, 🥕alimentación, 📜cuentas, 💳 tarjeta de crédito, entre otros pagos por bienes o servicios que consumes y utilizas. 

Controlar ingresos y gastos mensuales permite asegurar que el dinero -que tanto cuesta ganar- se destine al mejor propósito.  

Para personas que perciben ingresos que les permiten pagar todas sus cuentas y cubrir sus necesidades habituales, un presupuesto puede ayudarles, por ejemplo, a destinar un monto de dinero mayor a sus ahorros.  

Para personas cuyos ingresos son menores a sus gastos, armar un presupuesto puede ser crucial para identificar que gastos podrían reducirse, reemplazarse o, derechamente, eliminarse. 

Presupuestando, por ejemplo, es posible identificar los gastos hormiga, concepto con se denomina a esas compras pequeñas de cosas innecesarias y que, si bien por el costo pueden parecer insignificantes, mueven la aguja de la billetera a fin de mes.