Lo que no nos enseñaron en el colegio
Me acuerdo perfecto que en 5to básico dentro de mi lista de útiles para matemáticas venía un talonario de cheques. Cuando se usaban cheques, en los supermercados vendían talonarios de juego o en este caso como un material del colegio para aprender a hacer cheques.
La vaga memoria que tengo, porque siendo sincera la única vez que he usado uno fue para dejarlo en garantía de arriendo, es que me enseñaron cómo se cruzaban y cómo se llenaban. Con 10 años, probablemente sin tener idea de lo que eran los intereses o la cobranza, pero sí sabía hacer un cheque.
Y he aquí mi reflexión, en los colegios nunca nos enseñaron desde la otra vereda: cómo cuidar nuestra plata. Desconozco si hoy en día existen más espacios educativos en los establecimientos, pero sí existen más juegos sobre cómo gastar, que como sobre ahorrar.
Saber el valor de la plata, lo que cuesta ganarla y cómo ahorrarla, pareciera ser más una cosa que te inculcan en la familia y a mi parecer, eso puede ser dejar a la suerte un tema tan importante como la salud financiera.
Hay muchos que llegan a los 18, si es que tienen la opción, entran a la Universidad y les ofrecen sus primeros productos financieros. ¿Cómo se administran? ¿Qué me conviene? Difícil saberlo si antes no tuviste las nociones de condiciones como los intereses, los gastos de mantención y administración, los cobros, etc.
Algunas ideas
Tal como me enseñaron a hacer un cheque a mi con diez años, se puede enseñar la importancia de ahorrar y tener un colchón para las emergencias. Hoy tenemos mucho a favor para estimular a los más pequeños, por ejemplo, la tecnología. Que esas horas de pantalla puedan transformarse en alguna enseñanza o juego de cómo ahorrar, de cómo administrar el dinero sin gastarlo todo en una sola jugada.