¿Cuánto es mucha deuda?
Una de las preguntas que más nos han hecho cuando hablamos temas de educación financiera es el de la deuda. Es razonable, cuando sólo en el sistema bancario existen más de 4,6 millones de personas con deuda, a lo que hay que sumar a quienes tienen créditos automotrices, por compañías de seguros, cajas de compensación y otras instituciones.
¿Cuánto es demasiada deuda? Al igual que un termómetro te ayuda a saber si tienes fiebre, existen bastantes métricas que se analizan para responder a esta pregunta. Sin embargo, probablemente la más relevante es lo que se conoce como la “carga financiera”, o “financial burden”, en inglés.
La carga financiera es un cálculo relativamente sencillo: es sumar todos los gastos asociados a una deuda, generalmente la cuota y dividirlo por los ingresos que uno tiene, principalmente el sueldo.
Por ejemplo, si gano $1.000.000 mensuales, pago una cuota de un hipotecario por $200.000 mensuales y un crédito de consumo por $50.000 mi carga financiera es $250.000 / $1.000.000 = 25%
No existe un número mágico que genere consenso sobre cuál es la carga financiera ideal, pero si uno revisa la literatura la recomendación es que pagar las cuotas de una deuda hipotecaria no debiera ser más que un 25% de los ingresos, mientras que, para créditos de consumo, que son considerablemente más caros, se recomienda que esa cifra esté debajo del 15%.
Otra forma es compararse con el promedio. Siempre está el riesgo que el promedio esté malo, pero por lo menos uno sabe si está peor o mejor que los demás.
La CMF recientemente publicó una serie de interesantes estadísticas de ahorro y deuda en Chile, donde se ve que la carga financiera media de un hogar en Chile es del orden del 17% de los ingresos. Es decir, un hogar promedio gasta un poco menos de un quinto de sus ingresos en pagar deuda. Estas cifras vienen subiendo en 2022 tras caer en 2020-2022 producto de los retiros de las AFPs.
Ahora, si uno mira el 25% de los hogares más endeudados de Chile esa cifra llega a un 44%. Estimamos que estamos hablando de más de 500.000 personas. Es decir, este tipo de personas dedican casi la mitad de sus ingresos a pagar deudas, sin contar alimentación, transporte o educación.
Es bien probable que de aprobarse el proyecto de Deuda Consolidada (que va a cumplir una década en discusión), tengamos una imagen un poco más detallada, pero con la información que poseemos es posible mencionar que quienes dedican más de un 20% de sus ingresos a pagar deudas son los primeros que deben intentar reducir ese monto, para ello en nuestro Blog tenemos algunas herramientas para hacer frente a esta difícil situación: